El histórico goleador chileno Iván Zamorano ha comentado recientemente sobre la posibilidad de que el delantero francés Kylian Mbappé supere su récord de goles en la temporada de debut con el Real Madrid, un registro que ha permanecido intacto durante más de 30 años. Zamorano, quien se unió al club merengue en la temporada 1992-1993, anotó un total de 37 goles en todas las competiciones durante su primera temporada, contribuyendo significativamente a que el equipo ganara la Copa del Rey y la Supercopa de España de ese año.
El récord de Zamorano y la amenaza de Mbappé
A lo largo de los años, varios jugadores de renombre como Ruud van Nistelrooy, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema han intentado, sin éxito, igualar o superar el impresionante registro de Zamorano. Sin embargo, en la actual temporada, Mbappé, quien fue campeón del mundo con su selección en 2017, ha logrado marcar 33 goles en 44 partidos, quedando a solo cinco goles de alcanzar el récord del chileno.
Las declaraciones de Iván Zamorano
Zamorano expresó su opinión sobre el potencial de Mbappé para superar su marca, afirmando: “Para mí es un orgullo que un jugador de la categoría de Kylian bata mi récord. Creo que me va a pasar y por muchos tantos en breve. ¡Y quizás sea hoy mismo (sábado) ante el Valencia! Pues este chico es capaz de todo”.
El exdelantero también manifestó que no le preocupa perder su récord ante un jugador de la talla de Mbappé: “No me importa que Mbappé supere mi récord, pues es un auténtico crack, y me siento muy orgulloso de que debajo de mi registro haya leyendas como Cristiano Ronaldo, el brasileño Ronaldo, Benzema o Van Nistelrooy”.
Zamorano, quien ha tenido una carrera destacada en clubes como Sevilla, Inter de Milán y América de México, comparó sus habilidades con las de Mbappé, señalando: “Es cierto que yo tenía una habilidad especial para el cabezazo. El 40% de mis goles fueron con la testa. Quizás Kylian no tenga tanta destreza para situarse en el área y rematar de cabeza, pero es un crack en todo, y tiene muchísimas más cualidades”.
Además, Zamorano se describió a sí mismo como “un ariete de área, un jugador de pura raza, que luchaba cada pelota como si fuera la última. Era un guerrero que me involucraba mucho con todos los equipos en los que estuve y que sentía en cada partido la camiseta que llevaba”.