Carlos Alcaraz y Jannik Sinner se enfrentan en la final del US Open 2025, un evento que promete ser un hito en la historia del tenis. Este encuentro, que se lleva a cabo en el Arthur Ashe Stadium con un público lleno, no solo es significativo por ser el último Grand Slam del año, sino también porque el ganador se posicionará en la cima del ranking ATP. Este duelo representa la tercera final consecutiva entre ambos en torneos de Grand Slam, habiendo competido previamente en Roland Garros y Wimbledon. En el marco de este enfrentamiento, el primer set se inició con un marcador de 3-2 a favor de Alcaraz.
Desde el comienzo, ambos jugadores mostraron un nivel de competencia excepcional, realizando rallies intensos y tomando la iniciativa con ataques veloces. En este contexto, Alcaraz logró quebrar el servicio de Sinner en un game crucial, lo que le permitió imponer sus condiciones desde el arranque de la final. El español adoptó una postura agresiva, acercándose constantemente a la red para presionar a su oponente. La presencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el evento, que no se veía desde el año 2000 cuando asistió Bill Clinton, también fue un factor que atrajo la atención mediática hacia este enfrentamiento.
Durante el año 2024 y 2025, ambos tenistas han dominado el circuito, logrando que ningún otro jugador haya levantado un trofeo en este periodo. Esta situación recuerda a la era dorada del tenis con figuras como Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic, aunque es inédito que desde el inicio de la Era Abierta en 1968, dos jugadores hayan disputado tres finales en la misma temporada.
El historial de enfrentamientos favorece levemente a Alcaraz, quien lidera con un marcador de 9-5 en sus duelos directos, habiendo ganado cuatro de ellos en torneos Masters 1000. El español llega a esta final tras una campaña impecable en Nueva York, donde solo ha cedido un set y ha alcanzado su octavo torneo importante. Su regularidad y explosividad lo sitúan como una amenaza real para la racha de 27 victorias consecutivas en Majors sobre superficie rápida.
Por su parte, Sinner ha tenido una temporada extraordinaria, siendo campeón en Australia y finalista en Roland Garros. Ahora busca su cuarto trofeo, lo que podría cerrar un periodo de años dominantes en su carrera. A pesar de una suspensión de meses debido a un resultado positivo en controles antidopaje, su ascenso no se ha visto frenado. En esta edición del US Open, Sinner, que ocupa el número uno del mundo, logró vencer en semifinales a Félix Auger-Aliassime (27°) con un marcador de 6-1, 3-6, 6-3, 6-4, sumando así 65 semanas en el ranking.
Antes de llegar a la final, Sinner dejó en el camino a jugadores como Alexei Popyrin, Denis Shapovalov, Aleksandr Búblik y Lorenzo Musetti. En el lado opuesto, Alcaraz superó a Mattia Bellucci, Luciano Darderi, Rinderknech y Jiří Lehečka. Este nuevo “Big Two” del tenis masculino ha desplazado a la generación anterior, y en los últimos siete torneos, hoy sumarán su octavo enfrentamiento. Alcaraz resumió la situación diciendo: “Jannik jugó seguidas yo tres, refleja estamos a un nivel. A la vista de los resultados, es algo evidente”. Este contexto único convierte a ambos tenistas en protagonistas de una temporada importante, donde el campeón del torneo recibirá un cheque de USD 5.000.000, mientras que el subcampeón obtendrá la mitad de esa cifra. La definición, bajo el calor del evento, promete ser una herencia de la legendaria rivalidad en el tenis.