Una masiva evasión fiscal, a través del uso de medios de pago electrónico como herramienta para ocultar transacciones comerciales, fue develada por el Servicio de Impuestos Internos (SII), resultando en la formalización de 47 contribuyentes
La investigación desarrollada por el organismo determinó que estas personas naturales y jurídicas no declararon los ingresos asociados, ni pagaron los impuestos correspondientes al periodo comprendido entre los años 2020 y 2022, ocasionando un perjuicio fiscal que asciende a la cifra de $4.934.937.218, calculado a septiembre de 2025.
A partir de múltiples procesos de recopilación de antecedentes, y de los análisis realizados por las subdirecciones Jurídica y de Fiscalización del SII, se detectó que el modus operandi consistió en que los formalizados, aprovechando un vacío legal existente en ese entonces, utilizaban lectores de tarjetas de débito o crédito (conocidos coloquialmente como «maquinitas») para recibir los pagos por sus ventas de bienes y servicios, pero omitían declarar esos ingresos ante el organismo tributario, evadiendo así el pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y del Impuesto a la Renta.
Investigación, formalización y querella
El proceso comenzó con el análisis de datos proporcionados por los proveedores de los medios de pago electrónicos. Tras cruzar esta información con otras fuentes, el SII pudo identificar a 47 personas y empresas cuyo comportamiento tributario era irregular. Entre 2023 y 2024, el Servicio presentó tres denuncias ante el Ministerio Público, que corroboró las irregularidades y allanó el camino para la formalización, que se concretó el pasado lunes 15 de septiembre.
.La Directora (S) del SII, Carolina Saravia, explicó el contexto que facilitó el ilícito.
“Los imputados, aprovechando que en el periodo analizado no existía la obligación expresa para los proveedores de medios de pago de exigir la acreditación del inicio de actividades ante el Servicio, operaban sin declarar sus ingresos, evadiendo los impuestos correspondientes”, explicó la Directora (S) del SII, Carolina Saravia, citada en un comunicado de prensa emitido por el organismo.
Tras la presentación de estas denuncias, el Servicio de Impuestos Internos continuó con la fiscalización del comportamiento tributario de estos contribuyentes y sumó una querella criminal contra los responsables por tres tipos de delitos tributarios, todos tipificados en el Código Tributario:
-Presentación de declaraciones mensuales de IVA maliciosamente falsas, al subdeclarar los débitos fiscales generados por las ventas con datáfonos.
-Presentación de declaraciones mensuales de impuestos maliciosamente falsas, al declarar los débitos fiscales IVA que generaron a partir de las ventas de bienes que realizaron a terceros, mediante lectores de tarjetas de Crédito o Débito.
-Presentación de las declaraciones anuales de Renta maliciosamente falsas, al subdeclarar los ingresos que percibieron a partir de las ventas de bienes que realizaron a terceros, mediante lectores de tarjetas de Crédito o Débito,
-Omisión maliciosamente falsa de declaraciones de impuestos, al no presentar las declaraciones mensuales y anuales obligatorias, dado que desarrollaron diversas operaciones comerciales consistentes en ventas de bienes a terceros, mediante lectores de tarjeta de Crédito o Débito, las cuales «se encuentran afectas tanto al Impuesto a las Ventas y Servicios como al Impuesto a la Renta», señaló el organismo.
Confirmación del dolo y cambios legales
El SII fundamentó el carácter intencional o doloso de las conductas en tres pilares: la reiteración de los delitos a lo largo de tres años consecutivos, el abultado perjuicio fiscal causado y la experiencia de los contribuyentes, que por su trayectoria conocían sus obligaciones tributarias.
“Estos elementos permiten concluir que los querellados actuaron de manera dolosa al realizar las conductas constitutivas de los delitos tributarios ya mencionados, puesto que estaban en pleno conocimiento de su actuar ilícito y a sabiendas aceptaron su resultado”, concluyó la Directora (S) del SII.
Saravia también destacó que investigaciones como esta han impulsado importantes cambios legales para cerrar estos vacíos. “El trabajo del SII para combatir la evasión de impuestos y emparejar la cancha para quienes cumplen correctamente sus obligaciones tributarias, ha contribuido a la generación de diversos cambios legales, como la obligación, a partir del 1 de octubre, de acreditar que cuenten inicio de actividades quienes deseen prestar servicios al Estado y las Municipalidades, operar con medios de pago electrónicos, vender sus productos o servicios a través de marketplaces, o realizar operaciones comerciales con instituciones bancarias”.
“De esta forma, estamos incentivando la formalización de actividades y el cumplimiento de las obligaciones tributarias de manera justa y equitativa, entre todos los contribuyentes de nuestro país”, subrayó.